CRIMENYCRIMINOLOGO: JOAQUÍN FERNÁNDEZ GARCÍA: HAY PERSONAS QUE SABEN LO QUE ME PASO Y DÓNDE ESTOY

El 11 de septiembre de 2001 es una fecha que conmocionó al mundo, una fecha que siempre recordaremos y estará presente en nuestra historia. Un juego fatal del destino quiso que el 11 de septiembre del 2008 resulte escalofriante para una persona. Una persona con la que no nos hemos topado aún, pero a la que podemos considerar ya como un amigo. Una persona que desde aquel fatídico día de septiembre de 2008 lucha con un solo objetivo, conocer el paradero de su hijo 'Junior'. Pero lejos de ser egoísta con su propia causa, con mucho esfuerzo e ilusión, une y canaliza la solidaridad hacia nuestros “desaparecidos” y las familias que día a día afrontan una forma totalmente distinta de sobrevivir. Ha encarado el reto de presidir la asociación Sosdesaparecidos. Sí, hablamos de Joaquin Amills, un padre que desde el 11 de septiembre de 2008 busca cada día la verdad, busca cada día a su hijo y vive cada año su particular 11-S.

Joaquín Fernández García 'Junior' desaparecería el 11 de septiembre de 2008, con 23 años de edad en Carboneras (Almeria). Joaquín es el pequeño de cuatro hermanos y único varón. Un trabajador incansable, con la ilusion de pagar la casa que se había comprado él solo. Un chico que disfrutaba con el deporte y que con el paso del tiempo fue cambiando su bicicleta por la moto. Un accidente sobre la misma le hizo pasar por el quirófano para ser operado de un neumotórax en ambos pulmones.

El 11 de septiembre de 2008, Joaquin junto a su amigo Juan David, se echarían a la mar de la costa de Almeria, presuntamente a buscar un alijo de drogas, sin experiencia alguna en navegación a 30 millas de la costa durante la noche y con un barco sustraído del puerto de Carboneras. Es imposible sin experiencia llegar, tampoco sabían manejar GPS. Navegar de noche es difícil, más cuando pierdes la costa de vista. En el barco nunca se encontraron drogas ¿Iba a confiar algún narcotraficante un alijo de drogas a dos chicos inexpertos en navegación? Lo único cierto es que desde entonces 'Junior' sigue en paradero desconocido.

El superviviente, Juan David, fue, supuestamente, rescatado por un pesquero a seis millas de la costa después de que, según dijo en un primer momento, la embarcación en la que navegaban se quedara sin combustible y se lanzaran ambos al agua para alcanzar la costa a nado ¿Cómo puede alguien tirarse al mar a 12,593 Km de la costa? Encontrándose encima de un barco cabinado en perfecto estado, sin gasolina, pero acondicionado y con radio, bengalas, y uno o varios teléfonos?. Hay que recordar que Joaquín estaba operado de un neumotórax por lo que seguramente buscaría otras opciones antes de tirarse del barco. El superviviente mantuvo entonces que Joaquín murió agotado después de mucho tiempo en el agua, donde él mismo habría permanecido más de ocho horas. Según Salvamento Marítimo, la supervivencia por la temperatura del agua ese día y en esa zona, era como máximo de 4 horas. Juan David llegó a la costa en perfecto estado.

Salvamento Marítimo y el Servicio Marítimo, pronto se dieron cuenta que el muchacho rescatado Juan David, estaba mintiendo, estaba ocultando algo, que la búsqueda en la mar de 'Junior' escondía algo más, pues la forma de actuar de Juan David, el lugar de lo sucedido, las explicaciones y vacilaciones del rescatado, despertaban sospechas y así se lo comunicaron a los Investigadores del caso, con el fin de que al llegar a puerto Juan David fuera interrogado y dijera la verdad. Juan David mantuvo la versión de que habían naufragado en una Zodiac. Curiosamente, al salir del cuartel y encontrarse con la madre de Joaquín, la versión cambiaría por completo, diciendo que se habían quedado sin gasolina en una embarcación semirrígida, y por eso se tiraron ambos al agua. Salvamento Marítimo no da credibilidad a la versión de Juan David.

El día 12 de septiembre, a las dos de la tarde, aparece a la deriva una embarcación de fibra, grande, con dos potentes motores, muy lejos del lugar, la cual, días después el propio Juan David confirmaría que es la embarcación en la que navegaban.

La primera versión de Juan David es que hasta veinte minutos antes de ser rescatado, veía a Joaquín, que se alejaban poco a poco pero mantenían contacto visual y gritándose uno al otro, porque había grandes olas. Segunda versión, dice a la madre de 'Junior' a la mañana siguiente que este se murió en sus brazos de frío y entonces lo soltó. Tercera versión: el desaparecido estaba a escasos metros suyos, vio como chapoteaba y se hundió de golpe.

El resultado es que hasta la fecha, las mentiras y la cobardía ganan a la justicia. Una "desesperación de una familia que se mezcla con la frustración, el cansancio con el desconsuelo, el dolor con la soledad, porque cada día se convierte en una espera agónica y cruel, que no mata pero que tampoco deja vivir", como afirma Joaquín Amills en una carta remitida al ex Ministro del Interior Alfredo Perez Rubalcaba. Y un mensaje, que aquellos que seguimos de cerca a Joaquín en las redes sociales se repite continuamente en voz de su hijo 'Junior'. "Estoy desaparecido, pero hay personas que saben lo que me pasó y dónde estoy. Necesito que esas personas se animen a hablar aunque sea en forma de anónimo. Que simplemente busquen la mejor forma de decir esa verdad que cargan por cuatro años encima... el alivio será para muchos, pero principalmente para el que calla... Aquí no importa la venganza y él lo sabe, aquí lo único que se busca es algo que va a calmar a todos: la verdad". Una verdad que esperamos desde 'CrimenyCriminologo' sea temprana y que por fin Joaquin Amills "encuentre a su hijo y pueda llorar en paz".

«Mi hijo fue asesinado. Lo tengo clarísimo. Pero un año después del crimen sólo tenemos mentiras y contradicciones de los imputados, mientras Joaquín sigue desaparecido. No guardo odio ni rencor, ni siquiera quiero venganza, sólo justicia y, por encima de todo, quiero encontrar su cuerpo, o lo que quede de él, poder enterrarlo y saber la verdad, porque sólo entonces podremos pasar página y llevar una vida normal».